Pues nada. Lo prometido es deuda. Gracias a la colaboración desinteresada de Lametones de Amor, allí al lado, en la columna grisácea de la derecha, debajo de la foto del último famoso desaparecido, encontrarán un marcador, como el de los campos de fútbol, pero en versión funesta.
En él se irán registrando, poco a poco y a partir de la muerte de Janet Leigh, todos los fallecimientos, más o menos ilustres, separados en dos categorías: El equipo Local (o sea, los difuntos europeos, los más nuestros) y el Visitante (el resto del mundo), con lo cual queda claro que los foráneos (por extensión) tienen las de ganar. Eso está hecho siguiendo los cánones de la vida misma, ya que el más grande acostumbra a aplastar al más pequeño.
Y es que siempre he estado al lado de los perdedores. Incluso en la hora de nuestra muerte. Amén.
Gruñón, "malcarat" y criticón. Hace años perdió su sentido del humor en algún lugar recóndito y, en la actualidad, sólo sueña con retirarse al interior de una cabina telefónica.
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